lunes, 10 de septiembre de 2007

Las truchas del sábado maravillosas, de esas que ya es difícil encontrar; en los restaurantes ya son siempre de piscifactoría. Y para que las tripas no se relajasen demasiado el domingo hicimos un churrasco, incluso me permití el lujo de comer un chorizo criollo.

Como podéis ver me encuentro bastante bien, creo que con fuerzas suficientes para afrontar el otoño que ya se acerca.

Hoy he conseguido un frasco más de mercaptopurina.

No hay comentarios:

Publicar un comentario